TIÑENDO LOS DÍAS

Cachis, acaba de salir un poco el sol, pero en seguida se ha ido. Y es que, ni aunque le cantemos esa canción que mi hijo Adrián ha aprendido en el cole: "..sol, solecito, calientame un poquito....". Por ahora, se resiste. Así que mirando por la ventana, se me ocurre jugar un poco a teñirlo todo, como cuando éramos pequeños y resultábamos un auténtico peligro con los rotuladores en mano. Vamos a ver qué pasa si creamos una realidad más Rosarosae. Colorear es divertido y nos permite experimentar un poco.

Y también por la noche....